Linux y ciertas variedades de UNIX (FreeBSD, NetBSD, OpenBSD, SCO, Solaris-x86, etc), funcionan con rapidez y eficiencia en hardware Intel (x86), que Microsoft ha declarado previamente "obsoleto" para muchas de sus versiones de NT 4.0 (Internet Information Server, Back Office Server, otras ediciones "Enterprise" de sus servidores) y todas sus versiones para Windows 2000 (y posteriores), ofreciendo una funcionalidad igual o superior a la de los productos Microsoft. La mayor duración de la vida útil de la máquina conseguida por los sistemas operativos UNIX/Linux significa que los grandes gastos en hardware pueden separarse más en el tiempo, a la vez que los gastos en hardware al migrar desde NT o 2000 son mínimos o nulos. Durante años, la falta de estabilidad del SO Windows ha sido con frecuencia achacada, injustificadamente, a la plataforma hardware Intel x86, en lugar de achacarse al verdadero culpable: el propio SO Windows. Como ha quedado demostrado por las alternativas Linux y UNIX, sin duda para alegría de los fabricantes de sistemas x86 Intel y AMD, no hay ningún problema en esos sistemas que un SO decente no pueda curar.
Como en el caso de Windows 2000 y XP, aquellos que quieran actualizarse al servidor Windows .NET deberán estar preparados para los costes del nuevo hardware exigido por esa versión. Puesto que los sistemas operativos de Microsoft suelen dar un mal rendimiento cuando se los compara con UNIX/Linux en el mismo hardware, la estrategia técnica de Microsoft ha sido conseguir un mejor rendimiento gracias a un hardware más rápido. Aunque esto ha ayudado históricamente a los vendedores de hardware, las sensibles consideraciones presupuestarias de los departamentos TI están claramente fuera de las consideraciones de Microsoft.
Costosas actualizaciones de RAM y CPU fueron obligatorias para Windows 2000 y XP, lo que significó que máquinas más nuevas y rápidas reemplazaron a otras máquinas válidas para trabajar que ya estaban en uso. Una vez más Microsoft requiere de los ya exprimidos presupuestos de TI que los actuales inventarios de máquinas que ahora ofrecen un rendimiento aceptable (en parametros Windows) sean marcados como inútiles para las nuevas versiones de Microsoft Windows.
Esta "obsolescencia forzosa del hardware" significa que muchas de las hoy en día más comunes tarjetas de hardware (controladores de red, disco, vídeo y audio) no están soportadas por el nuevo SO. Salvo que los drivers sean publicados por los propios fabricantes de las tarjetas, mucho del hardware adquirido previamente no será configurableen las nuevas versiones de Windows. Los drivers deben ser enviados a Microsoft para ser "firmados" (reconocimiento oficial de que el driver funciona de verdad satisfactoriamente) para poder usarse en los nuevos SO de Microsoft. Desafortunadamente, esto significa que los vendedores de hardware no tienden a revisar sus diseños anteriores para actualizarlos, optando en su lugar por desarrollar nuevos productos. No hay absolutamente nada malo en este proceso, excepto que los productos resultantes tienden a incrementar la dependencia de sus características en Windows que pueden no ser soportadas por UNIX/Linux u otros SO. Siguiendo los planes de actualización de Microsoft, los líderes de TI se están encerrando de hecho en unas opciones de hardware muy limitadas y de entorno cambiante.
Es un hecho que en comparación con los SO de Microsoft, Linux y las versiones de UNIX basadas en x86 han tenido típicamente menos soporte para los nuevos interfaces hardware, puesto que los fabricantes han escrito casi siempre drivers para los sistemas operativos dominantes de Microsoft antes que para los demás. Sin embargo, UNIX/Linux ofrecen un rendimiento y capacidad hoy, en el hardware actual, que Microsoft sólo intenta ofrecer en el hardware más nuevo y caro. Además, debería destacarse que las industria del hardware basado en x86, como ejemplifican compañías como Creative Labs, Adaptec, 3Com, y muchas otras, se ha movido rápidamente para ofrecer soporte en Linux para sus nuevos productos en los últimos años. Para la mayoría de estas compañías de hardware, el soporte Linux de sus productos presentes y pasados es hoy un hecho. Los fabricantes OEM como IBM, HP y DELL dan ahora igual estado de desarrollo de hardware para Linux y Microsoft.
Las organizaciones que corren Windows NT en servidores y estaciones de trabajo Compaq (DEC) Alpha se sorprendieron al descubrir que Compaq y Microsoft dejaron bruscamente el desarrollo de Microsoft Windows NT 4.0 para esa plataforma. Cuando Microsoft mostraba la "escalabilidad" de Windows NT 4.0 en varias CPUs, siempre se refería a su version para Alpha. No hubo un debate público o una discusión sobre este tema. Se tomó la decisión y los clientes quedaron bloqueados debido a su "encierro". Los dueños de máquinas Alpha, encontraron agradecidos una versión de Linux totalmente funcional para esas mismas máquinas. Por supuesto, la migración al propio True64 UNIX de Compaq también era una opción atractiva. Sin embargo, el peligro de "bloqueo" del hardware quedó ampliamente ilustrado.
En consecuencia, Los SO Microsoft Windows operan sólo en la plataforma Intel x86. El escenario de hardware Alpha fue típico del poder que Microsoft parece llega a tener sobre las empresas TI. La fusión, a principios de 2002, entre HP y Compaq, con la resultante reducción del mercado de servidores x86 a, básicamente, tres grandes entidades (siendo las otras Dell e IBM), ilustra el hecho de que los directivos TI que deseen mantener su propio criterio sobre el software y el hardware que eligen deberían mantenerse alejados del "bloqueo" en un entorno sólo Microsoft.
Mientras que Microsoft Windows NT, 2000 y XP operan, por tanto, sólo en la arquitectura x86 (Intel y clones), Linux está disponible sin coste para x86, pero también para Sparc, UltraSparc, PowerPC, Alpha, iMac, PA-RISC y otras varias plataformas hardware. La apariencia y modo de uso de Linux corriendo en tan distintas arquitecturas es similar sin importar la plataforma hardware. Para organizaciones multiplataforma, Linux es una auténtica bendición.
IBM a portado (adaptado) Linux a su mas potente clase de ordenadores "mainframe", permitiendo a Linux operar en configuraciones tanto paralelas (decenas de SOs Linux funcionando simultáneamente en la misma máquina física) como virtuales (el SO Linux corriendo en una "máquina virtual" situada en memoria y soportado por otro SO). IBM ha convertido su línea "big iron" (mainframes de la serie z, servidores de trabajo de la serie i y las series p del tipo AIX) para operar con los Linux de 64-bit de Red Hat y SuSE.
A finales de 2001 este escenario de Linux sobre maimframes IBM fue adoptado por la empresa finlandesa de telecomunicaciones Sonera, que proporciona acceso a Internet de alta velocidad a mas de 500.000 subscriptores privados y 70.000 corporativos. Usando un sólo mainframe IBM, Sonera fue capaz de reemplazar 60 servidores Unix y Windows NT distintos. La clave de este éxito es la ejecución en el mainframe de 500 servidores virtuales corriendo software Linux instalado por Red Hat y SuSE. Este ejemplo no es único, ya que IBM está incrementado la lista de otros grandes clientes corporativos con Linux sobre Mainframe. En cada caso, la mayoría o todos sus servidores Windows fueron reemplazados o abandonados.
IBM no está sola en su su elevación de Linux a la cima de la computación corporativa. Intel y Hewlett Packard hacen de Linux como uno de los principales sistemas operativos disponibles para su CPU de 64 bits Itanium. HP está haciendo su propia versión especial de Linux de alta seguridad para este procesador. Contribuyendo con sus recursos al esfuerzo general del Linux-Itanium estaban empresas como Caldera, CERN, IBM, Red Hat, SGI, SuSE, TurboLinux y VA Linux Systems. Además, IBM, Hewlett Packard y SGI ofrecen paquetes de desarrollo de software para Linux sobre Itanium, y versiones compatibles del compiladorde GNU "GCC" y las "binutils" están siendo preparadas. Para ese fin, Intel, IBM, HP, Red Hat y SGI se reunieron en junio de 2001 para trabajar en mejorar GCC para Itanium. Es muy significativo que puesto que Itanium no es una extensión de la plataforma x86 de 32-bit y no está basada en la tecnologia RISC (como lo estaba el hardware típico de UNIX de los 90) es fundamental que la nueva síntesis de expertos en la nueva arquitectura EPIC del procesador Itanium incluya a la comunidad Open Source.
En el horizonte inmediato está la llegada de la CPU Opteron de 64 bits de AMD (conocida como Hammer) que se diferencia de la solución de Intel/HP en que hace extensiones a la plataforma de 32 bits x86. Esto requerirá la reescritura de los SO específicamente para esa nueva plataforma - algo en lo que Linux sobresale. Portavoces de Microsoft indican que se están centrando en Itanium para los 64 bits y que ofrecer SO Windows sobre Opteron no es, por tanto, una prioridad. Como ocurre con Itanium, Linux será uno de los primeros SO que operarán sobre Opteron. Mientras, Sun Microsystems aparentemente se está moviendo para ofrecer tanto la CPU Intel como la AMD en un nuevo rango de pequeños servidores de uno o dos procesadores en los que correrá una próxima distribución Linux propia de Sun.
Puesto que Linux ya lleva años corriendo en versiones de 64 bits, esencialmente todas sus aplicaciones están o se harán disponibles para las nuevas arquitecturas Itanium y Opteron rápidamente. Microsoft liberó su primer SO de 64-bits, una versión basada en Itanium de Windows 2000 llamada "Servidor Avanzado de Edición Limitada", en Julio del 2002 pero sin mucho ruido, pues unas excasas cinco aplicaciones (sus propios productos: Exchange, IIS, SQL Server, etc.) han sido certificadas por Microsoft como compatibles. Aparentemente están considerando una versión basada en Opteron. Con la letanía de problemas de seguridad que esas aplicaciones de Microsoft han mostrado, esto no es prometedor.